Este post queremos dedicarlo a aquellas personas que se preocupan por otras personas y nos escriben a nosotros en su nombre.

Muchas veces nos escriben personas preocupadas por alguien cercano que les gustaría que iniciasen una terapia psicológica pero estos no quieren, no les hacen caso o piensan que no tienen ningún problema. Solemos ser las personas allegadas las que notamos antes que algo ocurre con esa persona cercana a la que quiero; a veces son comportamientos o actitudes que estaban desde siempre y que pensábamos que no eran tan malos o los justificábamos; y otras veces puede que haya sido hace relativamente poco tiempo que observamos esos cambios y queremos que no vayan a más, pero el caso es que hemos intentado hablar con esa persona y no hemos conseguido nada.

Desde Crecimiento Psicológico no nos preocupa que alguien nos escriba en nombre de otros, pero si es importante que se tengan en cuenta los siguientes puntos para que no haya malentendidos ni problemas con esas personas cercanas. Vamos a ver cuales son:

1) Preguntarnos si lo hacemos por nosotros o por ellos: muchas veces nosotros padecemos los “malos” comportamientos de los otros y nos disgusta sobremanera. Vemos que necesitan ayuda, cierto, pero estamos más motivados por el hecho de que nos sintamos mejor nosotros que ellos. Si este es el caso no es malo que intentes que inicie terapia, pero debes dejarle espacio y tiempo para que decida, ya que esos cambios no estarán motivados por y para él y en caso de hacerlos forzados no serían muy duraderos.

2) No desesperes, a veces no es el momento: creemos que cuando alguien está mal, debe ponerse a trabajar en ello al momento. Lamentablemente esto no es cierto. Las personas necesitan sus momentos y sus espacios, el hecho de intentar forzarlos lo único que va a conseguir es que le cojan aversión a la terapia antes de empezarla o a nosotros mismos por proponerlo. Lo que decimos a las personas suele calar, con lo que aunque tu creas que lo que hablas con esa persona no lleva a nada, deja tiempo para que madure, puede que te sorprenda dentro de un tiempo con que va a ponerse a trabajar en el problema.

3) Nunca mentirles: si quieres conserva el cariño de esa persona, este punto es imprescindible. Si le quieres coger tu una sesión para que vayan, hazlo, no pasa nada, muchas veces la gente no se ve con fuerzas para dar ese primer paso e incluso a veces lo agradecen, pero lo que nunca se debe hacer, bajo ningún concepto, es mentirles sobre donde van a ir o sobre lo que esperas de ellos. En el mejor de los casos, aguantarían la sesión y nunca más volverían, lo más habitual sería que se enfadasen o se agravase el problema o la situación.

4) Quiero ir antes a contar mi versión: esto ocurre cuando me siento desorientado o con problemas sobre gestionar a la persona y su problema. Puede ser una pareja preocupada por su compañero o una madre por su hijo adolescente, pero muchas veces una sesión a tiempo para nosotros mismos nos hace ver la perspectiva del problema y nos deja más tranquilos. Podemos contar lo que nos pasa y muchas veces con eso, el “problema” del otro se soluciona.

5) Por último, la confidencialidad: este tema es muy importante; si al final esa persona por la que te has preocupado y por la que nos has contactado, has conseguido que se diera cuenta del problema y que se decidiera a venir, lamentablemente tenemos que avisarte que le protege la confidencialidad terapeuta – paciente (existe alguna excepción como con los menores, aunque aún así no se puede contar todo lo visto en sesión), es decir, no podrás llamarnos para preguntarnos qué cosas tratamos en sesión o qué cosas estamos viendo. Podrás llamarnos y podremos contestarte con generalidades de si mejora o no, o si le vemos bien o mal, pero nada más. Esto es algo importante a tener en cuenta, porque muchas veces creemos erróneamente que “como va a sesión por mi”, o “como soy yo quien paga”, tengo unos derechos adquiridos; sentimos decirte que no es así.

Estas son nuestras recomendaciones para contactarnos en nombre de otra persona para que esta inicie terapia. Estaremos encantados de responder cualquier duda que tengáis u os haya surgido a raíz de leer este post. Y por último, esperamos que os haya ayudado y que os hayáis quedado tranquilos con lo que habéis leído, no es malo ni debéis preocuparos porque queráis que alguien comience la terapia, pero si que debéis darle ese espacio y tiempo para que el decida.

Author Crecimiento Psicologico

More posts by Crecimiento Psicologico

Leave a Reply